SOBRE MANOS Y FUEGOS...

I

Algunos abogados desde los EEUU lanzan enormes peroratas responsabilizando a Jorge del Castillo prácticamente de todo lo que ocurre en el PAP, pero eso si, defendiendo a Alan García y ocultando de momento, su apoyo a Mauricio Mulder. Toda la crisis del PAP se focaliza en Jorge, cualquier cosa que diga o deje de hacer es muestra, prueba o evidencia que busca quedarse con el partido para su uso privado. Alan García, mansa paloma, según estos abogados, no tiene culpa de nada, lo mismo que Mulder.

Esta gente no aborda el tema de fondo: la corrupción y la claudicación política e ideológica de la clase política vitalicia que dirige el partido o aspira retomar su control directo.

También juegan con varias oposiciones: Si criticas a Alan entonces apoyas a Jorge, si defiendes a Jorge, entonces estas contra Alan. Si criticas a Mulder, le haces el juego a Jorge y te enfrentas a Alan..un Leoncito de escasa melena, desde Nueva Jersey lo dijo muy claramente.

Son juegos maniqueos y muy simplistas, al estilo películas de Holywood de la época del Far West, es decir malos contra buenos, indios contra el séptimo de caballería, John Wayne buscando acabar con el apache Gerónimo o viceversa.

El culto al caudillismo (en este caso a García) es uno de los males políticos peruanos. Y llama poderosamente la atención, que gente que reside en los EEUU mantenga dicho culto. El sistema político norteamericano descansa en varios principios, uno de ellos la Accountability (o rendición de cuentas), otro la dinámica de pesos y contrapesos (" cheks and balances"), los aspirantes a caudillos en EEUU tienen estos poderosos filtros sin los cuales el sistema político de dicho país estaría sujeto solo a liderazgos carismáticos. Y esto sin entrar al tema institucional federal.

Si los abogados que viven en EEUU insisten en su culto gelatinoso al caudillo García, significa que no han aprendido nada del sistema político norteamericano y que viven encerrados en guetos. Lo mismo puede decirse de aquellos que confunden "institucionalidad" con la defensa a rajatabla de Jorge del castillo.

Nunca abordan los grandes temas de la agenda nacional, o no los conocen o están de acuerdo con "El Perro del Hortelano", al menos la gente que apoya a Jorge, lo dicen claramente, para ellos el APRA como ideología ya murió. Les interesa inconsciente ó conscientemente "el partido" como vehículo de oportunidades (en criollo "arribismo"). Con el TLC supuestamente somos socios de los EEUU, y el "partido" puede desempeñar un rol. Adios Antimperialismo constructivo...¿Quien lo necesita?, la disputa fue y será por las agregadurías comerciales o civiles.

Es paradigmático el caso de un editor del libro en Inglés de García, "modernidad y política" el cual fue compensado con una agregaduría en EEUU y luego en China, sin mayor mérito que editar y pagar la traducción el mentado libro que pasó finalmente desapercibido.

Pero no todos los cc que viven en EEUU responden a estos patrones, están cc en Nueva York, Chicago, Miami, que defienden la línea fundadora del Aprismo histórico, una línea ética y de izquierda. En esta lista por ejemplo, nos han estado informando sobre el movimiento de indignados "anti wall street"en Nueva York o las movilizaciones en Chicago.

II

Debemos tener claro, que la alternativa a Jorge del Castillo no es Mauricio Mulder, un invento de García negado sicologicamente para las reglas democráticas. Si no estuviera en la política, Mulder sería un buen abogado para desahucios, pero nada más.

Debemos tener certidumbre que el regreso de Alan García al liderazgo omnívoro del PAP, sería reproducir el esquema de los últimos años, donde García solo usa al partido para sus fines y ambiciones personales, y como tapadera de sus negocios.Incluso sería más descarado, en la plena convicción que el APRA es su persona, porque los "apristas" o sea alanistas, le perdonan todo. Los "militantes" estarían en la misma condición que los carneros, que el rebaño, que la jauría. Ya no serían políticos, sino animales acarreados, según el viejo filosofo griego.

Jorge del Castillo está quemado, aunque técnicamente no tiene responsabilidad penal por los petroaudios, ello no lo exonera de la responsabilidad política de haber sido cabeza de una operación abortada de lobismo en perjuicio del Estado, para financiar su fallida candidatura en el 2011.Por eso tuvo que dejar el gabinete.

La megacomisión está haciendo su trabajo, una "infracción constitucional" es asunto que debe valorarse al margen de "fraternidades" ingenuas o de búsqueda interesada de "complots" del antiaprismo imaginario. (El verdadero antiaprismo que ha resurgido en el Perú es el hartazgo con la corrupción y la identificación de Alan/Jorge con el APRA)

Y si la "infracción constitucional no pasa en el pleno, García sorteará el problema. Son procedimientos al uso en todos los parlamentos del mundo. No es ningún "golpe parlamentario" al estilo Paraguay como descabelladamente lo ha declarado Jorge.

Dicho sea de paso, cada vez que Jorge quiere "defender" a García, este lo termina desautorizando. Una muestra de estos juegos entre el gato y al ratón, son las declaraciones de Jorge acerca de "no poner al fuego" las manos por García y luego denunciar a la megacomisión que lo acusa. Son cambios copernicanos producto de la necesidad de mantenerse en el liderazgo del aparato viendo hacia el 2014.

III

Mientras tanto Alan celebra el giro derechista de Ollanta Humala, tratando de subirse al carro y buscando complicidad. Jorge está aislado, a veces se desorienta dando marchas y contramarchas. El giro Humalista no le conviene, de hecho en sus cálculos asumía que Ollanta en el gobierno, se radicalizaría hacia la izquierda y ello llevaría a los medios de comunicación de la derecha, a los poderes fácticos, la oligarquía minera y los EEUU a crear un bloque "anti Humala" donde Jorge podría reciclarse luego del desastre de los petroaudios y las visitas a Caanan. Un bloque donde Jorge emergería como líder de las "libertades y las inversiones" con el respaldo del "partido"...pero ese escenario no se dio. Y Alan es quien quiere capitalizar la relación con Humala, mientras Jorge no quiere quedar fuera de la jugada.

En el fondo Jorge no quiere romper con Alan ni quedarse "en exclusiva" con el partido. Quiere ser el número dos y que no se discuta ese rol. Conoce bien a García y sabe que no es corredor de fondo, sino un manipulador de situaciones. Por eso hace correr el rumor entre sus mercenarios que es "el contrapeso" a García. Lo que no dicen sus corifeos es que desea ser nuevamente un "contrapeso leal" o sea simulado.

Por ello, García desautoriza a Jorge, Mulder se las agarra con Toledo y Jorge arremete contra Ollanta e inventa escenarios como el "golpe" parlamentario. Al final cada quien busca su lugar para no quedar fuera de la coyuntura y sus réditos, si estos se producen (por ejemplo que el pleno del congreso rechace la acusación contra García).

Y por supuesto, a lo lejos el comandante observa, escucha y sonríe. Sabe que los empresarios están hartos de tanta corrupción estatal y pública, que los intelectuales y comentaristas de la derecha quieren que se convierta en el relacionista público del "modelo" ante las clases populares. Deja que el congreso se ocupe de lo primero, el Estado en su momento hará lo segundo.

Finalmente, se necesita un liderazgo emergente de izquierda o centroizquierda basado en alianzas programáticas y una acción social fuerte.El espacio está nuevamente a disposición. El derechismo de García y sus adláteres lo inhabilita para ocupar dicho espacio (Mulder usa la retórica, pero es autoritario y cantinflesco), y la izquierda social ha comenzado su largo camino a través del desierto. La izquierda política y damnificados del giro derechista del Humalismo se están nucleando en torno a Susana Villarán con inciertos resultados. Sin mucho esfuerzo Nadine Heredia se está "colando", en su momento las políticas sociales harán el resto.

¿Y el APRA? depende, el APRA-partido correrá la suerte que corran García y Jorge, pero sin ética, sin moral política y sobre todo sin principios ideopolíticos fuertes.

El Aprismo independiente seguirá identificandose con las luchas sociales, los gobiernos progresistas de la región y promoviendo alternativas al modelo de gobernabilidad politica y económica impuesto a sangre y fuego con el golpe de estado de abril de 1992. Quizás haya más democracia y menos cleptocracia que en esos años, quizás sean otros actores, pero las reglas siguen siendo las mismas.