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Incendio de más de 20 horas habría sido un sabotaje, según jefe del CGBP

José Obando, director de Técnicas contra Incendios del Cuerpo General de Bomberos, confirmó que siniestro estalló en cuatro puntos y no en uno solo como suele ocurrir. Funcionarios de Educación guardaron material valorizado en S/. 280 millones en local que solo tenía un extintor.

Ernesto Guerrero L. y Edson Tinoco B.

El enorme y largo incendio que estalló la noche del jueves en el almacén central del Ministerio de Educación, ubicado en el Cercado de Lima, y que acabó con 280 millonesde soles entre libros, computadoras y otros materiales didácticos destinados para escolares pobres del interior del país sería un acto de sabotaje, según algunos indicios recabados por peritos del Cuerpo General de Bomberos del Perú (CGBP).

El brigadier mayor José Obando Morgan, director de Técnicas Contra Incendios de esa institución, aseguró que el fuego en el amplio inmueble de unos 6.000 metros cuadrados no comenzó en un solo punto como suele suceder en casos fortuitos, sino en cuatro sitios distintos.

"Hubo focos de iniciación en cada esquina del local", precisó. A su juicio, ello implicaría la posible participación de pirómanos en el lugar.

Igual hipótesis planteó Arnold Millet, gerente de Servicios Ciudadanos de la Municipalidad de Lima, y pidió a la policía indagar un posible acto criminal. Reveló haber conversado con gente que escuchó explosiones antes de que se iniciara el pavoroso incendio.

"No vaya a ser, como en el caso de la galería La Cochera (de Mesa Redonda), que se atribuyó a un cortocircuito. Yo tengo pruebas de que ese siniestro fue provocado", subrayó el funcionario edil.

La titular de Educación, Patricia Salas, consultada ayer al respecto, no descartó esta hipótesis e indicó que esperará los resultados de la investigación que ya realiza la Policía Nacional para saber si se trató de un acto provocado o no.

Documentos quemados

Si lo último fuera cierto ¿qué motivos pudieron inducir a terceros a causar un incendio de esa magnitud? La ministra aclaró que en el almacén no estaba la documentación solicitada por la megacomisión del Congreso de la República que investiga presuntos malos manejos de fondos públicos en la reconstrucción de los colegios emblemáticos durante el gobierno de Alan García.

Desde Huaral, el presidente de la República, Ollanta Humala, dijo que en el siniestrado depósito sí había documentación oficial de cierta importancia relacionada con otros temas del sector Educación.

Lugar Desprotegido

En tanto, fuentes de la Dirección de Seguridad del Estado, estratégica unidad que investiga el caso, revelaron ayer que la incendiada sede oficial no ofrecía ninguna garantía y era una bomba de tiempo.

En efecto, el extenso inmueble que ocupa casi toda una manzana entre las avenidas Venezuela, Tingo María, Antenor Orrego y la calle Juan del Mar Bermedo, no contaba con hidrantes ni líneas contra incendios.

Ni siquiera tenía elementales detectores de humo, instrumentos claves para contrarrestar a tiempo cualquier fuego incipiente, precisaron las fuentes consultadas por este diario.

Para colmo, el siniestrado predio disponía solamente de un extintor que nadie utilizó en los momentos cruciales. Lo último fue confirmado por el director de Técnicas Contra Incendios del los bomberos, José Obando Morgan.

"Aquí se ha trasgredido las normas vigentes. Para que tengan una idea, cualquier establecimiento pequeño, como una peluquería, por ejemplo, requiere de 2 extintores cuanto menos. Deduzcan ustedes cuántos aparatos de estos debieron haber habido en el almacén...", sostuvo el oficial bombero.

Extrañas licencias

Obando Morgan se mostró extrañado porque el depósito del Ministerio de Educación, pese a lo inseguro, contaba con licencias de funcionamiento expedidas por el Municipio de Lima y Defensa Civil.

¿Por qué se le expidió los permisos correspondientes si el predio no reunía los requisitos de ley? ¿La alcaldesa Susana Villarán y la ministra de Educación Patricia Salas estaban enteradas de dicha irregularidad? Estas y otras interrogantes forman parte de la investigación en curso.

Remoción de escombros

El extraño y voraz incendio se inició al promediar las 10.00 de la noche del jueves y se prolongó durante toda la madrugada y el día de ayer. Hasta el cierre de este edición los socorristas continuaban sofocando pequeños focos de fuego.

Fue necesario demoler parte del muro perimétrico de seis metros de altura, a fin de permitir el acceso de maquinaria pesada para remover los humeantes escombros.

También fueron abiertos forados de varios metros de diámetro en diferentes puntos del mencionado muro, para que los bomberos pudieran ingresar a atacar el fuego por distintos flancos.

Gran operativo

En el impresionante operativo tomaron parte 220 efectivos bomberiles de estaciones de Lima y Callao. También más de mil policías y 50 agentes del serenazgo, así como socorristas del sector Salud.

Las fuerzas del orden cortaron el tránsito vehicular e impidieron el acceso de civiles a la zona de emergencia. Todos los vecinos del sector fueron evacuados por medida de seguridad. No se reportaron heridos, a excepción de seis bomberos que sufrieron contusiones menores y problemas respiratorios por inhalación de humo.❧

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Otros 2 locales del sector Educación se incendiaron en Ucayali y Loreto

El 20 de febrero último, un extraño incendio devastó el local de la Dirección Regional de Educación de Loreto, ubicado en la tercera cuadra del Malecón Tarapacá, ciudad de Iquitos.

En dos horas el fuego convirtió en cenizas los archivos en los que había abundante documentación oficial relacionada con contratos y adquisición de bienes. Ese mismo día se atribuyó el siniestro a un cortocircuito. Hasta la fecha la policía no ha dado cuenta de las conclusiones de la investigación oficial.

El 25 de febrero otro incendio dejó en ruinas la Dirección Regional de Ucayali, en la ciudad de Pucallpa. Desde un primer momento se dijo que podría tratarse de un sabotaje para deshacerse de contratos irregulares.